El sector vitivinícola europeo mira con interés a Sudamérica

El Comité Europeo de Empresas Vitivinícolas (CEEV) ha reiterado su apoyo al acuerdo entre la Unión Europea y el bloque de países del MERCOSUR, señalando el papel estratégico que desempeñará para fortalecer la sostenibilidad económica del sector vitivinícola en Europa.

Este organismo, que agrupa a 25 organizaciones nacionales de 13 Estados miembros de la UE, además de Suiza, Reino Unido y Ucrania, reúne a un consorcio de grandes empresas y pymes que representan más del 90% de las exportaciones de vino del continente. En España, las entidades adheridas al CEEV incluyen a la Federación Española del Vino (FEV) y la Asociación Española de Elaboradores y Distribuidores de Vermouth, Bitter-Soda y Aperitivos Vínicos (ANEV).

Tras más de dos décadas de negociaciones, el acuerdo ha llegado a una fase clave, con disposiciones que apuntan a reducir barreras arancelarias y simplificar normativas comerciales. Mauricio González-Gordon, presidente del CEEV, ha señalado que este tratado no solo mejorará el acceso al mercado, sino que también integra aspectos medioambientales que benefician a ambas partes. Según el dirigente, la oportunidad que representa este pacto es esencial para que las bodegas europeas accedan a nuevos mercados y atraigan a consumidores en una región de más de 300 millones de personas.

El MERCOSUR, compuesto por Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia, es un mercado prometedor para los vinos europeos, especialmente en Brasil, donde los aranceles actuales pueden llegar hasta el 27%. Además, las complejidades de los procedimientos de importación dificultan la entrada de productos, algo que se espera que cambie con la ratificación del acuerdo. Brasil es el tercer destino para el vino español en América Latina y el principal dentro del MERCOSUR, habiendo duplicado el valor de las exportaciones en los últimos seis años. Según datos recientes, en el primer trimestre de 2024, España exportó a Brasil 2,2 millones de litros de vino, con un valor de 5,3 millones de euros, lo que refleja un crecimiento superior al 20% en valor respecto al mismo período del año anterior.

El acuerdo permitirá además a los países europeos, diversificar sus mercados en una región clave, al tiempo que fortalece la presencia de vinos de calidad en mercados emergentes. Según el informe bilateral MERCOSUR 2023, el vino y el mosto ocupan el segundo lugar en los productos más exportados de la UE a este bloque. Desde la Federación Española del Vino, José Luis Benítez, director general, ha subrayado la importancia de los tratados de libre comercio como el de MERCOSUR, especialmente en lo que se refiere a los lazos culturales e históricos que unen a España con estos países. Benítez ha expresado su confianza en que el acuerdo permita consolidar el crecimiento de las exportaciones y fortalecer la percepción del vino español como un producto de referencia a nivel mundial.

El acuerdo no solo tiene implicaciones comerciales, sino que también está alineado con el compromiso del sector europeo hacia la sostenibilidad y las prácticas responsables. Las últimas revisiones incorporadas al tratado integran objetivos medioambientales que refuerzan esta visión, asegurando un impacto positivo tanto para los países exportadores como para los importadores. Por ello, el sector vitivinícola europeo ha instado a los responsables políticos a concluir el proceso de ratificación, considerando los beneficios que este pacto ofrece para la economía del vino y para los objetivos medioambientales compartidos entre las partes.
(vinetur.com)