En la reciente edición de la San Francisco World Spirits Competition, considerada la competencia más prestigiosa en el ámbito de las bebidas espirituosas, el pisco Black Heron, producido en el Valle del Limarí por la Pisquera Tulahuén, fue galardonado con el reconocimiento “Best in Class” como el mejor pisco del certamen.
Este logro cobra especial relevancia al coincidir con el quinto aniversario del lanzamiento de Black Heron, en octubre de 2019. El destilado, caracterizado por su innovador proceso de ahumado y maduración en barricas de roble francés, se ha convertido en un referente para la industria gracias a su alta calidad y una propuesta que combina tradición con modernidad.
Jaime Camposano, enólogo y socio de la Pisquera Tulahuén, destacó la importancia del premio. “Este reconocimiento valida nuestro compromiso con la elaboración de un destilado de alta gama y nuestra dedicación por innovar. Black Heron es el reflejo de una tradición familiar de cinco generaciones y de nuestro esfuerzo por llevar el pisco chileno a estándares internacionales de excelente”.
En su versión 2024, San Francisco World Spirits Competition contó con la presencia de los más destacados expertos de la industria, como Julie Reiner, cofundadora de Clover Club, Leyenda y Mixtress Consulting; Toshio Ueno, vicepresidente y cofundador de la Sake School of America, y Molly Horn, Gerente de Estrategia de Cócteles de Total Wine & More, quienes destacaron las cualidades excepcionales de Black Heron, desde su perfil aromático ahumado hasta su diseño inspirado en el estilo Art Decó, que rinde homenaje a la historia de la pisquera.
Este triple destilado, elaborado con uvas moscatel cultivadas en la Región de Coquimbo, es el primer pisco ahumado del mundo. Su proceso de elaboración, que incluye una guarda de hasta seis años y el uso de aguas provenientes del deshielo andino, ha sido clave para posicionarlo como una opción premium tanto en coctelería como para degustación pura.
La historia de la Pisquera Tulahuén se remonta a 1850, cuando la familia Álvarez Camposano inició la tradición en la localidad homónima, situada a 1.200 metros de altura en la Región de Coquimbo. Desde entonces, el legado familiar ha evolucionado para convertir a esta pisquera en una de las principales productoras de pisco del país.
El reconocimiento obtenido en San Francisco marca un hito para el pisco chileno en su posicionamiento global. Black Heron, que ya se comercializa en mercados como Europa, América y Asia, proyecta un crecimiento sostenido en nuevas plazas estratégicas como el Reino Unido y Brasil.