Una de las empresas vitivinícolas más emblemáticas del Valle de Napa, en California, se vendió por alrededor de 2 mil millones de dólares y pronto pertenecerá a otra reconocida firma de capital privado.

Se trata de la marca Duckhorn, que hasta el momento era una de las pocas bodegas que cotizan en bolsa en el estado, y que a su vez son dueños también de Duckhorn Vineyards, Decoy y Sonoma-Cutrer. Según un comunicado de prensa, tras un acuerdo en efectivo valorado en 1,950 millones de dólares, ahora pertenecerá a otra empresa con sede en Beverly Hills, que se especializa en inversiones en alimentos.

Butterfly Equity (conocida también como BFLY) adquirió la cartera vitivinícola y con esta compra ahora tendrá en su poder un total de 11 marcas de bodegas. La venta fue aprobada por unanimidad por la junta directiva de Duckhorn, que cuenta con un período de 45 días para negociar adquisiciones alternativas de otros grupos.

Fundada en el 2016, esta empresa cumple un rol protagónico en el mercado, ya que es un actor importante en el sector alimentario. Además, es propietaria de Qdoba, una cadena de restaurantes de comida rápida mexicana, como también de Bolthouse Farms y Chosen Foods.

La compañía que se vende fue creada en 1976 por Margaret y Dan Duckhorn, pero pasó por varios cambios de propiedad a lo largo de los años. Esta pareja hizo crecer la marca, desde una pequeña propiedad de 10 acres (4 hectáreas) hasta una bodega de renombre mundial, antes de venderla en el 2007 a la firma de capital privado GI Partners, por 250 millones de dólares.

Casi una década después, fue comprada por otra firma de capital privado, TSG Consumer Partners, por 600 millones de dólares. Sin embargo, en el 2021, la compañía logró algo que ninguna otra marca de vino había probado desde finales de la década de 1990: salir a bolsa.

Desde aquel momento, tuvo mayor éxito y sus acciones subieron recientemente hasta un 101%, cuando los directivos anunciaron la adquisición por parte de Butterfly Equity.
(tvazteca.com)