En Chisinau, la capital de Moldavia, hay una bodega que supera, al menos en tamaño, a todas las demás del mundo: la Bodega Milestii Mici está incluida desde 2005 en el libro Guinness de los Récords por ser la bodega más grande del mundo.
En total son 200 kilómetros de galerías, de los cuales unos 55 kilómetros se utilizan como bodega que almacena, conserva y madura vinos de alta calidad -las mejores cosechas del país- desde su fundación en 1969. Los artículos más valiosos aquellos que se produjeron en 1973-74 y cuyas botellas tienen un precio aproximado a los 500 euros.
Ubicada en una antigua mina de piedra caliza que cerró en los años 60, la visita promete descubrir toda una ciudad subterránea donde ha sido necesario hacer carreteras con señalización y dar nombre a sus calles para facilitar el recorrido en coche, bicicleta o a pie.
Nada más llegar a las instalaciones ya sorprenden sus dos grandes fuentes que vierten simultáneamente vino blanco y tinto en distintas copas, todo un adelanto de lo que espera al visitante que se adentre en estas cuevas que guardan entre sus muros historia, tradición, cultura y por supuesto mucho vino.
La enorme bodega alberga cerca de dos millones de botellas, más del 70 por ciento de los vinos almacenados son tintos, el 20 por ciento son blancos y alrededor del 10 por ciento son vinos dulces que se conservan a una temperatura constante de entre 12 y 14 grados centígrados y una humedad relativa del 85-95 por ciento.
(abc.es)